LA
TURISTA
La
montaña oscura justo antes de la medianoche
Las lechuzas se dejan escuchar
Entre
caminos de piedra marfil
La
turista camina indefensa
Se
la está llevando el viento
Los
álamos se van meciendo
La tierna mirada de un lobo al acecho
Acelera
los pasos de la transeúnte
Poco
habitual del paraje desierto
Podría
ser un fantasma, un muerto andante,
No
se sabe. No es importante esto
Solo
los pasos que se enredan con la maleza
Los
troncos viejos desperdigados
En
lo irregular del paraje.
La
turista encuentra un riachuelo
Sumerge
sus manos y bebe un poco de agua fría
La
luna menguante
Como
un policía al que ella le confía su cuerpo
Exhala
suspiros quejumbrosos
No
se sabe si está herida
No
se sabe si aún tiene vida
La
oscuridad se hace más espesa
A
medida que muere el día
Entre hojas y ramas la turista se hunde más
bella
Se
entierra en sus propias huellas
Los
recuerdos llegan curiosos a su cabeza
Tomando
cerveza
En
el pub ostentoso de Londres
Aviones
de primera
Blues
de tristezas
Tropieza
y cae en mitad del camino
Recordó
el lugar hermoso de donde vino
Que lejos que estaba de aquel camino
La
eternidad de la memoria
Dejará
de serlo al morir
Desea
prevalecer, anhela resistir
Pero
falta mucho para eso
El
tatuaje empieza a arder
Hace
pocos días se lo mando a hacer
Estaba
aburrida en el letargo de sus ilusiones vacías
El
aroma de aquel fin de semana en la habana
La
chica cubana
Con
la que se curtió en la habilidad lésbica
Que
dejo como pacto secreto en un hotel barato
La
locura y el perderse hasta fundir la razón
Asfixiándose
en el agua salada de los océanos del corazón
Le
sangra el pinchazo de su brazo izquierdo
Le
duele mucho y no lo puede evitar
La
turista y la primera vez con la canalla
Los
ojos dilatados
Los
dientes apretados
Y
la canalla recorriendo su cerebro
Los
extremadamente hipersensibles recuerdos
La canalla sola en su cuarto
La
canalla en toda su piel
La
canalla en lugares sombríos y rancios
Cuando
todo dejo de importar
La
turista en su último viaje
Ya
no existe el color en sus mejillas
Ya
no existe el equipaje
Ella
también se escapó de casa
La
montaña es más difícil de escalar de lo que piensa
La
montaña es la montaña
Ahora
ella sabe que no podrá esperar el amanecer
Se
hizo demasiado daño
Se
dejó echar a perder
Irse
es lo que queda
Vida
de ojos sin pupilas
Vida
de tener un sentimiento raro
Algo
ahora se rompió
La
canalla y las voces
La
canalla costosa
La
canalla implacable.
La
canalla nunca descansa.
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Cada día es cómo un domingo. Todos los días son silenciosos y grises...
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