viernes, 12 de agosto de 2011

PARA NADIE (5)






El señor W llevaba como tres años sin salir de la casa después de que se le murió la mujer. Yo todos los días pasaba por el frente de esa casa rumbo al colegio y nunca nadie asomaba. Nosotros le arrojábamos piedras y escribíamos grafitis en las paredes, pero nada. El tipo no salía. Me acuerdo que una tarde las autoridades del pueblo llegaron a la casa y golpearon la puerta y como siempre, nadie abrió. Entonces forzaron la cerradura y entraron violentamente, a ver qué pasaba. La gente se amontono en la entrada a chismosear pero no se escuchaba nada adentro. Después de unos minutos las autoridades del pueblo volvieron a salir y llamaron a un cerrajero para que arreglara la puerta y después se fueron sin dar ninguna explicación. De eso ya hace como diez años. Ayer pase de nuevo por la casa del señor W y la puerta estaba abierta. Eran como las diez de la noche y no había transeúntes. Estaba yo solo, viendo esa puerta que siempre estuvo clausurada, por fin abierta. No pude resistir mi tentación y entre a ver qué secreto ocultaban esas paredes. Después salí y volví a cerrar la puerta con fuerza, y me cerciore que hubiese quedado bien trancada. Y no quiero hablar más del tema…





REBOBINE SU CABEZA AHORA...