viernes, 2 de noviembre de 2018

ELISE




















Hola a todos:

Retomando actividades estaré compartiendo con ustedes, humildemente, claro esta, mi nuevo libro, titulado ELISE. Un intento mas de escritura. Muchas gracias.

STAROSTA.


*******************************************************




1

Una imperiosa necesidad de no estar solo nunca, obligaba a Lian a buscar permanentemente una mujer para estar con ella. Mujeres que a su vez eran apartadas poco tiempo después de ser conquistadas. Le aburría el hecho de no tener temas profundos de conversación con ellas, le parecía que las mujeres de las cuales él se rodeaba eran bastante comunes y corrientes, poco interesantes, levemente estúpidas. Con cada una de ellas sufría del mismo impacto inicial donde se deslumbraba por su belleza física y alguna que otra conversación intensa y termina al poco tiempo con el desdén de descubrir que se había equivocado y que después del sexo la sensación de vacío era inabordable. Siempre estaba como poseído por estos estados emocionales que lo hacían sentirse desdichado y miserable.

No volvía jamás a entablar contacto con alguna de estas mujeres. Las apartaba del todo. Las dejaba en un lugar de su mente y su corazón donde jamás transitaba. Era como una luz encendida que se pagaba de repente y no volvía a alumbrar nunca jamás. Su infierno personal consistía en ser consciente de que esta situación lo mantendría solo y sin amor el resto de su vida.

Su historia venia de muy lejos, es una historia cercana ya a los treinta años. Y venia del odio, de la pena, de la soledad. Venia de los libros y los discos que se devoran los adolescentes en secreto para dar sentido a sus vidas. Venia de eso que se siente al habitar un pueblo de mierda, una ciudad de mierda, un país de mierda, una década de mierda. Venia de un domingo triste, sentado, solo, al borde de una cama pensando en que sería de su vida sin familia, sin educación, sin un lugar donde ir, sin alguien quien lo amara. Es una historia de caminar por las calles de la infancia en donde fue golpeado y engañado más de una vez. Un pueblo del que quería escapar para hacer una vida, trabajos de mierda que le recuerdan que no ha escapado del todo de ese lugar, la sensación eterna que nada tiene sentido. La vida es una herida absurda, decía una canción, y parece enmarcar el trascurrir de muchos por el mundo.

Llegó al mundo en Londres, por un azar del destino, en la típica casa de clase media - baja de sus padres. Su madre descendía de holandeses, y su padre de franceses, pero ambos eran alemanes. La dura y distante figura de su padre se diluye de su vida, al irse detrás de una camarera gorda del centro de la ciudad, dejando a la pobre mujer embarazada y con un hijo de cinco años. La mujer buscaba trabajos en casas de familias adineradas para poder llevar el sustento a su hogar, pero en un giro cruel del destino, murió dando a luz junto a la criatura. Lian termina viviendo con parientes. Un tío y su esposa, personas caritativas y pudientes que se llevaron al niño. Ellos no tenían hijos, eran una familia distinguida y acomodada de Manchester. Su nueva protectora amó a Lian desde el primer momento y tuvo una amorosa influencia en él. Por su parte su tío, un poco por lastima, un poco por lealtad a su hermana fallecida y otro tanto por complacer a su esposa, no se opuso en recibirlo en su hogar. Se encariñó con él, sin adoptarlo legalmente. Su tío era una persona fría y con el paso de los años sus personalidades terminarían chocando irremediablemente.

Con la adolescencia aparecieron los amores, el primero de Lian se llamó Christine. Una mujer un año mayor que él en edad y muchísimos en personalidad y pensamiento. La sabe inconquistable, la idealiza. Christine veía en Lian a un chico amigable, pero no como una pareja. La hermosa y dulce Christine también introdujo el dolor en la vida de Lian. Finalmente logra concretar una relación formal pero al mes ella viaja a otra ciudad dejándolo solo. El trato de buscarla de todas las formas posibles pero la distancia se hizo muy larga y ella después consiguió a otro hombre con quien formo un hogar. Ese dejo de abandono amoroso marcó la personalidad de Lian en torno a las relaciones venideras en su vida.

La casa adoptiva de sus tíos ya no era más su casa. Su madrastra lo amaba pero empezó a enfermar. Su tío, ante esta situación, le dedicaba cada vez más tiempo a su esposa y muy poco por no decir nada, a Lian. Se volvía cada vez más severo y el chico a su vez más rebelde. Entonces descubrió la existencia de una amante de su tio y estallo en cólera por dos motivos: por la  ofensa de sus actos a su madrastra y por la evidente realidad de que jamás sería adoptado legalmente. Lian decide entonces partir y buscarse una vida solitaria, donde no dependiera de nadie. Era el intentar vivir a duras penas pero por sus propios medios, en un claro intento de justificarse de buena manera, ante sus propios ojos. Ocasionalmente se veía con su tio, el cual le proporcionaba algo de dinero con el cual decidio entrar a la universidad. Al no tener definido su derrotero de vida, opto por la medicina, pero abandono el primer año. Decidio entonces intentarlo con la música. Se compro un viejo piano en deplorable estado, sobre el cual practicaba, poco apasionadamente, su disperso deseo de ser músico.

La vida como una búsqueda de lo que es real, de lo que es verdadero, es un ejercicio de tremenda desolación y desencanto. Al entregarse a esta búsqueda probablemente el resultado será descubrir cosas nada deseables. Lo dijo Camus, y tenía toda la razón. El ser humano siempre fantasea y trata de proyectar lo que quiere ser, mas no lo que es realmente, porque la realidad nos daría palmos en las narices y luego nos tumbaría en la lona. La insensatez de vivir para ir a estudiar, conseguir un trabajo aburrido que te consumirá más de la mitad de tu vida, disfrutando de deliciosas, pero miserables migajas que solo sirven para anestesiar lo que el ser humano ya sabe: La vida como experiencia es un ejercicio maravilloso y miserable al mismo tiempo. La vida es una mierda. Depende de la concepción que cada quien tenga de la misma, pero el resultado final, siempre apunta a algo muy parecido, pues al ser tan perecederos, pareciera como si no existiese tiempo suficiente para aprender a vivirla bien. Vamos acumulando experiencias a través de los errores que cometemos, cuidándonos de tratar de no volver a cometerlos, pero las mismas piedras se atraviesan periódicamente en nuestro camino y no hay agilidad suficiente para evadirlas todas. Y no es que fallamos y después corregimos elegantemente. Parece que en cada ocasión solo fallamos de mejor forma. Es todo. Lian vivía en torno a ese espectro de pensamiento diariamente.


Y con las mujeres siempre era lo mismo. Pero con Elise parecía diferente. Sintió que ella lo hacía sentir demasiado bien consigo mismo. Estaba casi seguro que ella sería la mujer para el resto de su vida. Sentía la lujuria, todo el rollo pasional, a pesar de que ella no le presto mayor atención. Era una mujer diferente, entregada a una vida de desenfreno y obsesionada con la pintura. Estudiaba bellas artes y el mundo lo media en tonalidades, estilos, pinceladas y oleos. Lian continuaba su vida ambivalente, pensando constantemente en Elise... 


**********************

Quiero conocer tu mundo....ese del que tanto hablas