viernes, 28 de diciembre de 2018

ELISE (6 Y ULTIMA!!!!)


Hola a todos:

Hasta aca publico este libro llamado Elise. Si quieren leer el resto del mismo o descargarlo, pueden hacerlo en la siguiente dirección:






O como siempre dándole click a la caratula que aparece a la derecha de este blog.

Muchas gracias. Felices fiestas. Les deseo un buen 2019. Lo mejor aun esta por venir !!!!!!





Margot, como otros tantos de cientos de novias anónimas, contenía casi todas las cualidades de esta clase de mujeres entregadas y correctas a pesar de gustarle la vida nocturna y los paseos, pero Lian no era el hombre que ella necesitaba, feliz de ver que su esposa era una profesional o encantado de llegar a su casa y encontrar todo limpio y en su puesto, como una postal de una revista de modas o farándula. Él era un hombre complicado y ella en el fondo lo sabía, pero estaba enamorada de Lian por una razón que ella no podía explicarse y eso era suficiente para hacer de ese coctel de emociones un verdadero desastre.


Su novia cocinaba delicioso, era una hija ejemplar, tenía exquisitos modales, tocaba la guitarra dulcemente, era excelente estudiante y tenía algunas virtudes más, pero para Lian esas cosas no demandaban mayor atención de parte de él, más allá del hecho de que Margot era excelente en la cama y era lo único que le atraía, por usar una palabra, de ella. Decía que una casa limpia o una mujer de mostrar no tenía nada que ver con el amor, y bajo esta premisa había decidido que Margot no sería la mujer de su vida. El quería otra cosa, aunque no sabía que era.


De igual forma se burlaba de los supuestos amigos que frecuentaba, cuando le decían que se estaban enamorando de sus novias. Les reprochaba el hecho de sentir amor por alguien a quien el consideraba “Una persona ordinaria” y les recordaba la cantidad de mujeres interesantes que andaban por allí, esperando ser tomadas. Se entretenía en hacerle imaginar a sus amigos lo aburrido de una vida llegando día tras día a un hogar a ver siempre a la misma persona y el horror de ver como esa figura deseada empezaba a envejecer ante sus propios ojos hasta convertirse en un adefesio, física y sentimentalmente. No entendía los hombres que alardeaban de tener esposas. Le parecía una soberana estupidez, aunque su anhelo era encontrar alguien con quien compartir su vida, así no se lo confesara abiertamente a nadie. No podía vivir sin alguna ilusión.

Imaginaba a sus compañeros pasados unos años, ya con la certeza de haber cometido un error al casarse y deseosos de escapar de esa vida e irse a vivir con la amante. De hecho algunos ya se habían casado hacia algún tiempo y el percibía los inicios de esas intenciones en algunos. Salían a beber los fines de semana y el alcohol los empujaba a confesar el aburrimiento de la vida conyugal y el deseo febril por otra mujer más joven, algunos incluso terminaban cortejando a chicas solitarias, buscando tórridos romances pasajeros. Consideraba de igual manera que las esposas no era que estuvieran en una situación mejor: Las imaginaba totalmente desdichadas, presas de otras pasiones inconfesables, deseos de aventuras sexuales, curiosidad de otras relaciones, al igual que sus esposos, pero ellas lo disimulaban mucho mejor mientras vivían totalmente encerradas en su inescrutable interior.

Lian definitivamente no sentía nada por ninguna de sus amantes, pues a pesar de estar con Margot tenia aventuras fugaces con otras, algunas de ellas tremendamente bellas. Le gustaban las mujeres blancas, de cabello rubio o muy oscuro, con facciones finas, ojos grandes y labios carnosos. Y el desgraciado tenía la buena fortuna de dar siempre con alguna mujer así pero siempre terminaba lleno de desdén. Él lo hacía porque sentía que el sexo sin amor no era suficiente, y era el amor lo que no había encontrado en ninguna de estas mujeres.


Por su parte Elise estaba entretenida en otros asuntos. Casi todas las mujeres con las que salía Lian pertenecían a estratos medios. Eran el producto de hogares de empleados que siempre vivieron así y estos a su vez heredaron este estilo de vida de sus padres y así sucesivamente.  La clase media trabajadora que sueña con darles a sus hijos la oportunidad de un futuro mejor pero que terminan fallando en el intento. No por esto sus hijos sentían que pertenecían a este grupo social y siempre piensan que son mejores que sus familias, estas mujeres eran las favoritas de Lian, pues ellas, en su afán de mostrarse más de lo que eran, se convertían en presas fáciles de la manipulación.  Pero Elise no era de este grupo. Venia de una familia bien acomodada, su padre era un abogado exitoso y prestante, y su hijo mayor siguió el mismo camino. Ella era la única hija y para colmo la menor. Era la consentida del hogar. Su madre era ama de casa y mantenía todo al día, y ella solo se interesaba por sus pasiones: La pintura y la música. Era una burguesita con deseos de ser bohemia, pero en el fondo solo deseaba seguir la tradición familiar: Vivir bien.

La finalidad de muchas parejas es finalmente casarse. La finalidad de muchos hombres es engañar a las mujeres, y casarse llevándose alguna ventaja o beneficio en el acto. La finalidad de muchas mujeres es casarse con un hombre que este a la altura de las expectativas, no de ellas, pero sí de sus familias o su entorno social. Algunos sienten que se casan por amor, pero en la mayoría de estos casos es gente de escasos recursos que más que amor, buscan compartir con alguien la miseria de sus trágicas vidas, y en la mayoría de los casos estas uniones terminan invariablemente en infidelidades  y violencia doméstica, hijos producto de hogares rotos y un circulo interminable de vendettas y traumas familiares.


Elise veía todo este panorama actual de relaciones con algo de confusión. Por un lado deseaba desarrollar su vida en una actividad de superación personal donde una vida de casada o una maternidad no eran de su apetencia. Pero a la vez quería las cosas tradicionales con las que había sido educada: Estudiar, ser profesional, casarse, tener hijos y continuar la estirpe. Había perdido la virginidad al salir del colegio y por una temporada tuvo una vida de promiscuidad al entrar a la universidad. Pasado el tiempo se aburrió de esto y empezó a ver a los hombres como una compañía que le apetecía, por lapsos de tiempo no muy largos, pues al igual que Lian, sus parejas la aburrían después del torrente pasional que le generaban. Era una mujer cariñosa y le gustaba generar compromisos pero cuando las cosas empezaban a tornarse un poco más formales buscaba excusas para terminar las relaciones. Vivía en una lucha interna, pues sentía que era joven y debía vivir más, pero el poder elegir la hacía sufrir, pues íntimamente temía que por estar en ese plan dejara escapar algún buen partido.
Elise se veía con Lian de vez en vez en la universidad, pero con el tiempo empezaron a cruzarse más, ya que ella termino siendo novia de Arlan, estudiante de música y frecuente participante del grupo bohemio al que pertenecía Lian. Para él fue una sorpresa empezar a ver a Elise los viernes en la noche y secretamente sufría al verla junto al otro muchacho, pues él sentía que ella debía pertenecerle. Lian se encontraba mucho más interesante que Arlan, y se recriminaba constantemente el hecho de no haber cortejado a Elise antes que el músico que ahora salía con ella. La envidia le corroía las entrañas, pero no dejaba ver nada a los demás. Conversaba con ellos indiscriminadamente y de temas que giraban siempre en torno a la música y la pintura. Nunca de otra cosa.

La gente cuando interactuaba con Lian solo tenía dos opciones: O lo aborrecían o se volvían amigos. No había términos medios. Lian era capaz de manejar una impresionante elocuencia o de pasar casi desapercibido, según sea el caso. A muchas personas esas cosas le intrigaban, así como el hecho de ser capaz de hablar de temas cultos y profundos como de cosas superficiales y tontas, siempre animada y deliciosamente.



Lian por su lado lo sabía y le encantaba manejar esos estados con un nivel de tensión tremendos, pues sabía que especialmente con las mujeres le salía bien, Las chicas siempre estaban tratando de descifrarlo y él siempre jugaba a no dejarse leer, ese era el juego de seducción que llevaba a Lian siempre a buen puerto con las chicas. Durante estas conversaciones Elise también empezó a notarlo, así como el hecho de que el la mirara de reojo y se quedara observándola, para luego bajar la mirada y tomar el vaso de cerveza. Ella se dio cuenta que le gustaba a Lian, pero ella lo veía como un tipo más bien raro, y no muy del tipo de hombres con los que ella habituaba a salir, y como el jamás hizo ningún intento por acercarse a ella más allá de aquellas reuniones casuales con amigos, termino ignorando el tema. No así Lian que buscaba la forma de descifrarla y saber por dónde entrar a atacar. Sabía que la tenía difícil, pues Arlan era un gran tipo, incluso le caía bien a el mismo, pero soñaba con estar con Elise, y ese deseo se fue incrementando conforme pasaban los días. 



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Quiero conocer tu mundo....ese del que tanto hablas

viernes, 14 de diciembre de 2018

ELISE (5)







Los dolores de los pies lo agobiaban continuamente en la última temporada. Como una manifestación de las cargas espirituales, la preocupación por darle sentido alguno a su vida se transformaba en dolores en las plantas de los pies que le hacían pasar malos ratos. En las noches no podía conciliar con facilidad el sueño a causa de los mismos y le reprochaba a Dios la falta de suerte en su vida o el no encontrar un camino que le condujera a una felicidad de manera pronta. Lian no entendía como la bienaventuranza no era una cosa de un día para otro y la espera lo agobiaba, al descubrir que al final de esta, no  había nada.


Se entretenía imaginando que cualquier día, a cualquier hora, de una forma casual y desprovista llegaría alguien a su vida que lo protegería. ¿De qué manera? No sabría indicarlo con certeza. Pero cualquier día, una intervención extra terrena entre lo divino y lo humano le daría el boleto hacia una mejor vida. Entonces caía en la visión de Elise. Se veían bastante poco y sus sentimientos hacia ella no eran del todo claros. A veces le gustaba, le atraía poderosamente, y en otras ocasiones simplemente dejaba de pensar en ella, pues prefería entretener su mente en otros asuntos.


Los días trascurrían en la interminable e inamovible monotonía. Salía con mujeres por breves lapsos de tiempo, en un círculo sinfín de conocerse – beber – tener sexo y terminar la relación. Lo hacía con el mismo dinamismo y energía con la que simulaba con los contertulios músicos mientras bebían y hablaban de música. El los odiaba pero seguía frecuentándolos y comportándose de manera encantadora con ellos, mientras pensaba en lo imbéciles que eran, igual que con las mujeres.


En algunas situaciones concretas, se esforzaba por tratar de descubrir características interesantes en las mujeres de la universidad o del trabajo con las que salía, pero después de un tiempo, al decepcionarse de lo corriente de las mismas, terminaba por alejarlas de mala manera de su lado, llegando incluso a humillarlas, recalcándoles lo rápido que terminaron acostándose con él y el hecho de ser personas con un coeficiente intelectual inferior, según sus estándares.


La mayoría de las chicas con las que tenía relaciones en ese momento, eran, al igual que él, seres con tristeza, con desprendimiento de cualquier emoción o arraigo profundo hacia algo o alguien. El las prefería pues entendía este territorio mejor que nadie y era más sencillo para usar sus tretas de hombre profundo y enigmático. Aunque siempre se preguntó si en realidad las mujeres solo querían o buscaban lo mismo que él y simplemente lo dejaban actuar su papel para sacarle beneficio de lo que querían y nada más. Eso lo hacía sentirse más despreciable aun, pues además de ser utilizado, se sentía ridículo al percibirse descubierto en sus ardides baratos de galán oscuro e intrigante. 

Finalmente consiguió una novia, Margot, la cual no lo satisfacía en lo absoluto. Había algo que le gustaba del sexo con ella, eran sus senos grandes y redondos, o su forma de moverse, y era el único motivo por el cual había decidió quedarse con ella. Era estudiante de Filosofía, una chica con familia de dinero y sin preocupaciones, que gustaba de disfrutar la vida entre bares y actividades universitarias. El despreciaba todo eso y fingía sentirse igual de eufórico que ella cada vez que estaban juntos o compartiendo entre amigos en común, pero en realidad se sentía miserable y envidioso de Margot, pues en el fondo, deseaba enloquecidamente experimentar esa sencilla felicidad que al parecer le era totalmente esquiva.


Estudiaba detenidamente a Margot y la encontraba similar a las novias de sus amigos. Todas parecían cortadas por un mismo molde. Eran particularmente resentidas, ambiciosas, fatuas, muy poco honestas y estúpidamente orgullosas de ser así.  Lian a veces creía que estas mujeres eran de este modo porque querían ser todo lo inversamente contrario. Pero al querer ser así automáticamente perderían todo el encanto que las caracterizaba, pues muchos hombres gustan de cortejar a las mujeres malas, pues las buenas les resultan terriblemente aburridas. Pero a Lian hasta las malas le desinteresaban. Detestaba a las mujeres con el pensamiento de convertirse en madres, andar cocinando y lavando, visitando iglesias y dedicándole frases y canciones ridículas y cursis a sus amores. Representaban todo lo que el secretamente y en la misma proporción odiaba y anhelaba al mismo tiempo. 



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Quiero conocer tu mundo....ese del que tanto hablas

viernes, 7 de diciembre de 2018

ELISE (4)




Elise por el contrario no se distraía con tales pensamientos. Para ella Dios era una energía, una fuerza superior a la cual todos volvían, pues de esa misma fuerza provenían. Para ella Dios era un tema privadísimo y muy personal que no gustaba discutir con nadie más, pues era su decisión no hacerlo. Pensaba que el diablo, como se conoce, con cachos, cola y tridente no existe. El diablo en si era una personificación de las maldades del ser humano que al sumarse, generan una presencia maligna que hecha todo a perder. Elise estaba segura que esta fuerza oscura era capaz de apoderarse del alma de algunos, destruyéndolos por completo.



Las horas y los días se amontonaban en el calendario sin mayor diferencia, días monótonos y aburridos, siempre iguales. La rutina se filtraba en su vida por las ventanas y las puertas de su casa, ingresaba por su nariz e inundaba sus pulmones, sus músculos, su cerebro. La vida trastocaba gris y sin mucha alegría. Tenía lapsus en los que una energía rebosante lo llevaba a planear muchas cosas, trazar caminos más claros en su vida, tener ideales concretos y hasta trazar cronogramas y estructuras para lograr lo que quería. Pero era un efecto de corta duración, pues pasados unos días, volvía a la abulia habitual de una mente dispersa y ajena de todo lo que es concreto en el mundo. Tenía un trabajo de medio tiempo pasando música en un enorme bar del centro de la capital de jueves a domingo, pero este tipo de vulgares bagatelas no eran para él, pues aspiraba a mucho más.





Esa desazón de vivir se traspasaba a su parte física: Se le veía más delgado, la tez amarillenta del que no duerme ni se alimenta bien, el cabello empezaba a crecer desordenado en una cabeza más desordenada aun, llena de complejos, ires y venires propios de una personalidad trastocada al hedonismo y a la vez al sentimiento de una libertad mal encausada. Levemente encorvado, movimientos nerviosos y pasos alargados y rápidos a través de calles medio oscuras y mojadas, pues le encantaba salir solo a caminar y a fumar después de que la lluvia arreciaba. Le encantaba ver el asfalto húmedo y los charcos refractando las luces de la ciudad al caer la noche. Su rostro, a pesar de la juventud, ya mostraba pequeños surcos que se intensificaban mas cuando estaba ebrio, cosa que también últimamente se estaba volviendo más habitual. Ropa oscura desteñida completaba la foto de este personaje que avanzaba a tientas por la oscuridad de una vida llena de deseos sin lugar adonde apuntalarlos.







Lían a veces deseaba recurrir a la magia, a cualquier tipo de magia que le permitiera tener una vida más fácil y acomodad. Pensaba en la opción del dinero como un canal para poder hacerlo que se le diera la gana, aunque en el fondo no supiera en lo más mínimo que era lo que quería hacer con su aburrida vida. Ansiaba hacerse millonario a través de un golpe de fortuna como ganarse la lotería, o la aparición repentina de algún pariente lejano que le legara abundante fortuna. Estos trances de insulsez y estupidez lo abordaban cada cuanto y le hacían sentir más miserable aun al darse cuenta que tales sucesos no ocurrían y muy seguramente no ocurrirían jamás en su vida. Cuando era adolescente no tenía ni idea que sería de su vida, y en ese tiempo para él era algo tremendamente encantador. No sabía si terminaría trabajando en un abasto transportando bultos de comida de un lado a otro con su espalda, o sería un vigilante en un centro comercial o un hotel, o un empleado de alguna fabrica y se la pasaría todo el día operando alguna maquina o cosiendo zapatos. No lo sabía. Y no le interesaba. No le importaba qué clase de trabajo fuera con tal de que nadie lo conociera y él no conociera a nadie. No soñaba con socializar, ser aceptado y popular. Su vida no apuntaba a ese lado. Quería un sitio donde estar solo, o por lo menos no tener que estar hablando con todo el mundo. Eso quería.  Nunca supo por creía que lo verían como un pobre diablo, un miserable al cual no tenían por qué buscar y lo dejarían tranquilo. Él iría todos los días, operaria la máquina que le fue asignada, llenaría la planilla con el producido diario y después se iría. Al finalizar el mes le pagarían y con el dinero ganado sobreviviría dándose algunos placeres mundanos y eso sería todo. Viviría en una habitación en arriendo quizás, con una cama, un televisor, alguna ropa y una guitarra podría ser, pues la música siempre le llamo la atención como vía de escape. No hablaría con los vecinos, no le interesaría en lo más mínimo interactuar con ellos, solo con el arrendatario, a fin de cada mes, para pagarle el arriendo y ya. Prepararía su propia comida y así viviría muchos años, hasta que un día encontrara alguna chica que le gustara y se iría a vivir con ella.  Se iría a vivir con el a esa habitación y después buscarían una casa o un sitio más amplio donde vivir. Si llegaban a tener hijos, sería uno, máximo dos. Trabajarían para enviarlos a la escuela, el colegio, la universidad, y después ellos se irían a hacer su vida y él se quedaría solo con su mujer y moriría prontamente, pues no le interesaría vivir más de cincuenta años. Ver cómo llegaba la vejez y la debacle siempre le pareció algo muy morboso y aburrido. Después los años pasaron y Lian entendió que parte de ese destino gris era verdad. Muy pocas cosas no se cumplieron de su epifanía.


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viernes, 30 de noviembre de 2018

ELISE (3)







Lian se entretenía hablando con algunos conocidos de la facultad de música de la universidad. Discutían ampliamente sobre los encuentros y desencuentros propios de la profesión. Por un lado estaba los más acérrimos seguidores de la academia que pretendían sobremanera interponer el recurso que el músico estudiado debe siempre navegar lejos de las orillas tormentosas de la música vanguardista, que consideraban por demás vulgar. Pensaban que el académico era un músico que debía ante todo dedicarse a la música mas canónica, llena de retruécanos y formulas ya diseñadas. El otro bando era el más experimental, que deseaban fusionar los ritmos, las culturas, los compases, las notas, los instrumentos. Lian estaba en un término medio: Por un lado valoraba lo que la academia podía brindar. Estaba de acuerdo que era necesaria para poder comprender la música, pero por otro lado estaba a favor de la experimentación, el caos, el romper esquemas. Pensaba que él tenía la razón, pues no era músico, y lo hacía desde la opinión, pues creía que las ideas habían superado a la academia desde hace mucho.


Los recalcitrantes se burlaban abiertamente de él: No sabía tocar ningún instrumento realmente, pertenecía a otra facultad y escuchaba y veía la música desde el lado más vulgar: el del oyente. Tenía unos conceptos bastantes retorcidos con respecto a la sonoridad. Alguna vez había propuesto grabar un disco y que cada tema fuese compuesto e interpretado por un solo instrumento, en una idea minimalista. Los más modernos aplaudieron sonoramente la idea pero los otros solo lo veían como un chimpancé que hablaba con la convicción propia de los ignorantes.


Lian era un soñador empedernido. Su mente divagaba ociosa y feliz por mundos y realidades alternas, en donde a él siempre le ocurrían esas cosas maravillosas que tanto ansiaba le pasasen. Un mundo casi inmaterial en donde flotaba presa de sus más incontenibles deseos y necesidades. También era abiertamente entregado a sus caprichos. Sus banalidades y su mundanidad le generaban placeres de corta duración por los cuales estaba dispuesto inclusive a venderle su alma al diablo. Aunque era más bien un pensamiento ocioso, pues él era un agnóstico declarado y no creía en la existencia de ninguna divinidad, ni sagrada, ni maligna. Pensaba que temerle al diablo era tan irrisorio como tenerle miedo a un duende o a un hada. Era de la opinión que tales sandeces no debían ocupar tiempo en la vida de una persona inteligente. Lo mismo opinaba hacia la existencia de Dios, aunque allí si prefería guardarse sus opiniones, pues, así no fuese a ninguna iglesia ni practicara ninguna religión o acto religioso o cristiano alguno, muy en el fondo, sentía que existía, pues en ocasiones hablaba internamente con él y pedía por el fin de sus desventuras. Y eso era una forma de fe. En el fondo le rogaba a ese Dios por ser alguien trascendente en la  vida de las personas que le conocían, o por lo menos de las mujeres que trataba. Y es que todos queremos que nuestro nombre, nuestra existencia signifique algo, pero no necesariamente tiene que ver, o viene de la mano del reconocimiento. Queremos que signifique algo para nosotros mismos. Y era el deseo inconsciente de Lian en realidad.


El reconocimiento es importante para muchos, es una manera de medir el paso por lo que hacemos, pero al final entre la cama y el techo, esta toda la verdad, y esa solo la conocemos nosotros, y allí, nadie se puede engañar. O eres o no eres, y generalmente, siempre nos quedamos cortos, siempre algo falla, hay algo que falta, tiene que ver con la naturaleza humana: Nunca estar satisfecho. Depredadores de absolutamente todo lo que concierne al vivir, siempre se quiere un poco más, el ser humano quiere hastiarse hasta morir y que los demás no importen. En esa puja, nunca se saldrá bien librado de nada. No hay límite a la desdicha y la insatisfacción. Fuimos educados para abarcar y nunca sentir sacio. El universo parece totalmente distante e indiferente a nuestra situación, somos terriblemente insignificantes ante él, no significamos nada cuando queremos significar algo. El sentir que se tiene poder es un instinto, pues al tener poder empezamos a cambiar nuestro sentido de la mortalidad. El ser humano no solo quiere el trascurrir, busca el ser recordado, más allá de su permanencia física en el mundo. Y eso cuesta, cuesta libertad. Nos sometemos a todas las condiciones necesarias para buscar un fin vulgar como ese, sin entender que solo al perderlo todo, podríamos llegar a ser libres para hacer cualquier cosa. Pero no nos educaron para pensar así, para actuar y ver la vida de ese modo. Nos enseñaron a cuidar, acaparar, poseer, tener, acumular, pues es la única manera de generar experiencia enriquecedora y sensación de éxito. Cualquier tipo de pérdida o desprendimiento se asemeja peligrosamente al fracaso, y los estándares a los cuales nos somete la sociedad nos prohíben tener ese tipo de sensación en nuestra vida. Nos enseñaron a sentirnos culpables por todo: Si tenemos un trabajo aburrido y que no nos gusta, nos hacen sentir culpables con la frase: “Pero agradézcale a Dios que tiene trabajo, muchos no lo tienen" Si no nos gusta lo que estamos comiendo nos dicen: "Pero usted se queja y no se da cuenta que hay muchos que se mueren de hambre" Este tipo de situaciones nos condicionan, nos hacen sentirnos intranquilos y aceptar situaciones que no deberían ser aceptadas. No entendemos que comparándonos con los demás no vamos a mejorar nosotros mismos, y mucho menos ayudar a los otros.



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viernes, 16 de noviembre de 2018

ELISE (2)





Pasaban días e incluso semanas sin verla o encontrársela en la universidad. Le gustaba imaginarse como seria salir un día con ella, de que hablarían, que temas abordaría el para impactarla y a su vez, esperar ser sorprendido con lo que Elise le dijera. Se imaginaba un camino iluminado por un sol tranquilo, el silencio del lugar, los dos solos, nadie más en el recorrido. Él se sinceraría con ella y le explicaría que a pesar de su devaneo con las mujeres, nunca fue infiel con ninguna de ellas o mintió sobre algo en la relación. Soñaba encontrar en ella algo reciproco a esa revelación y se imaginaba como sería el primer beso, el olor de su cuerpo entre sus brazo y el sabor de sus labios. Conocería sus buenos momentos, sus males, mientras la noche caía suavemente sobre ellos y las estrellas en silencio contemplarían el nacimiento de un gran amor.

Aunque en cierto modo Elise si terminaría engañada del todo ante su situación, como más tarde se daría cuenta. Lian era un tipo muy analítico con cada situación o circunstancia de su vida, pero con Elise las reglas en él se rompían y actuaba a veces de manera autómata y en otras, como un perfecto idiota. Él era consciente de la situación y se criticaba a si mismo por ser tan descuidado y poco calculador. Ella era como un relámpago en la oscuridad que lo enceguecía y lo hacía avanzar a tientas. Pero al mismo tiempo no era de su apetencia internarse en la investigación de tales causas. Se entretenía con dejarse llevar por la corriente que simbolizaba ella en su adentro. No se afanaba en lo absoluto en explicarse siquiera a sí mismo el porqué de tales comportamientos.


Lian además sufría de prevenciones un tanto paranoicas en donde pensaba que tal vez Elise se enamoraría de él excesivamente y terminarían complicándose la vida mutuamente. Esta expectativa le genero un anhelo inquebrantable que algo ocurriera y fuera tan extraordinario y genial que cambiaría su vida para siempre. Pero a la vez temía que esto le ocurriera y hasta actuaba de forma contraria para que no pasara, pues le daba mucho miedo el cambio. Se rehusaba en redondo a detenerse y analizar esta peculiar situación, no le interesaba ahondar en sí mismo o en sus pensamientos y sentimientos tan contradictorios.


Su juventud primera también estuvo enmarcada por la soledad y el abandono amoroso. Sufrió más de lo que disfruto en cuanto a enamoramientos se refiere. El problema de la gente es que es muy ansiosa y no se sabe disfrutar. Y a Lian también le paso. El recordaba esas épocas y pensaba que la inexperiencia rinde frutos y pasa cuenta de cobro, o quizás tenia demasiado para dar y no se supe contener. El caso es que padeció más de lo debido y a raíz de eso después tuvo una época de soledad tremenda pues no quería enamorarse de ninguna mujer. En el fondo era probable que tuviera miedo. El cuerpo tiene memoria. Y todavía le ocurría, pues había hecho sufrir a algunas mujeres que no se lo merecían. Aunque también es verdad que todos los hombres terminan matando lo que aman. Algunos lo hacen con una mirada de desprecio, otros utilizando palabras hipócritas y dulzonas, otros lo hacen con un beso, y otros con la crueldad más impactante que se pueda conocer. Durante un tiempo a Lian le gustaba sentarse a la orilla de un rio con color plomizo a recordar los amores vividos, noches de insomnio y remordimiento, pensando que había roto mas de una promesa hecha sin palabras, habría podido aliviarle a aquellas mujeres sus males inclusive, pero no lo hizo, solo les dejo como consejo el que salvaran sus vidas, pues solo tenían una, y no era al lado de él. Después se sentía abandonado, como un niño que juega descalzo en un parque desolado, así se sentía, no tenía un amor para él. Y él no le daba amor a nadie. Y eso ni lo hacía sentir bien ni mal, pero a veces la soledad podía más. Entonces extendía sus brazos a la ciudad, porque sentía que solo la piedra, el cemento, el asfalto y el acero aceptaban su amor.


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Quiero conocer tu mundo....ese del que tanto hablas

viernes, 2 de noviembre de 2018

ELISE




















Hola a todos:

Retomando actividades estaré compartiendo con ustedes, humildemente, claro esta, mi nuevo libro, titulado ELISE. Un intento mas de escritura. Muchas gracias.

STAROSTA.


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1

Una imperiosa necesidad de no estar solo nunca, obligaba a Lian a buscar permanentemente una mujer para estar con ella. Mujeres que a su vez eran apartadas poco tiempo después de ser conquistadas. Le aburría el hecho de no tener temas profundos de conversación con ellas, le parecía que las mujeres de las cuales él se rodeaba eran bastante comunes y corrientes, poco interesantes, levemente estúpidas. Con cada una de ellas sufría del mismo impacto inicial donde se deslumbraba por su belleza física y alguna que otra conversación intensa y termina al poco tiempo con el desdén de descubrir que se había equivocado y que después del sexo la sensación de vacío era inabordable. Siempre estaba como poseído por estos estados emocionales que lo hacían sentirse desdichado y miserable.

No volvía jamás a entablar contacto con alguna de estas mujeres. Las apartaba del todo. Las dejaba en un lugar de su mente y su corazón donde jamás transitaba. Era como una luz encendida que se pagaba de repente y no volvía a alumbrar nunca jamás. Su infierno personal consistía en ser consciente de que esta situación lo mantendría solo y sin amor el resto de su vida.

Su historia venia de muy lejos, es una historia cercana ya a los treinta años. Y venia del odio, de la pena, de la soledad. Venia de los libros y los discos que se devoran los adolescentes en secreto para dar sentido a sus vidas. Venia de eso que se siente al habitar un pueblo de mierda, una ciudad de mierda, un país de mierda, una década de mierda. Venia de un domingo triste, sentado, solo, al borde de una cama pensando en que sería de su vida sin familia, sin educación, sin un lugar donde ir, sin alguien quien lo amara. Es una historia de caminar por las calles de la infancia en donde fue golpeado y engañado más de una vez. Un pueblo del que quería escapar para hacer una vida, trabajos de mierda que le recuerdan que no ha escapado del todo de ese lugar, la sensación eterna que nada tiene sentido. La vida es una herida absurda, decía una canción, y parece enmarcar el trascurrir de muchos por el mundo.

Llegó al mundo en Londres, por un azar del destino, en la típica casa de clase media - baja de sus padres. Su madre descendía de holandeses, y su padre de franceses, pero ambos eran alemanes. La dura y distante figura de su padre se diluye de su vida, al irse detrás de una camarera gorda del centro de la ciudad, dejando a la pobre mujer embarazada y con un hijo de cinco años. La mujer buscaba trabajos en casas de familias adineradas para poder llevar el sustento a su hogar, pero en un giro cruel del destino, murió dando a luz junto a la criatura. Lian termina viviendo con parientes. Un tío y su esposa, personas caritativas y pudientes que se llevaron al niño. Ellos no tenían hijos, eran una familia distinguida y acomodada de Manchester. Su nueva protectora amó a Lian desde el primer momento y tuvo una amorosa influencia en él. Por su parte su tío, un poco por lastima, un poco por lealtad a su hermana fallecida y otro tanto por complacer a su esposa, no se opuso en recibirlo en su hogar. Se encariñó con él, sin adoptarlo legalmente. Su tío era una persona fría y con el paso de los años sus personalidades terminarían chocando irremediablemente.

Con la adolescencia aparecieron los amores, el primero de Lian se llamó Christine. Una mujer un año mayor que él en edad y muchísimos en personalidad y pensamiento. La sabe inconquistable, la idealiza. Christine veía en Lian a un chico amigable, pero no como una pareja. La hermosa y dulce Christine también introdujo el dolor en la vida de Lian. Finalmente logra concretar una relación formal pero al mes ella viaja a otra ciudad dejándolo solo. El trato de buscarla de todas las formas posibles pero la distancia se hizo muy larga y ella después consiguió a otro hombre con quien formo un hogar. Ese dejo de abandono amoroso marcó la personalidad de Lian en torno a las relaciones venideras en su vida.

La casa adoptiva de sus tíos ya no era más su casa. Su madrastra lo amaba pero empezó a enfermar. Su tío, ante esta situación, le dedicaba cada vez más tiempo a su esposa y muy poco por no decir nada, a Lian. Se volvía cada vez más severo y el chico a su vez más rebelde. Entonces descubrió la existencia de una amante de su tio y estallo en cólera por dos motivos: por la  ofensa de sus actos a su madrastra y por la evidente realidad de que jamás sería adoptado legalmente. Lian decide entonces partir y buscarse una vida solitaria, donde no dependiera de nadie. Era el intentar vivir a duras penas pero por sus propios medios, en un claro intento de justificarse de buena manera, ante sus propios ojos. Ocasionalmente se veía con su tio, el cual le proporcionaba algo de dinero con el cual decidio entrar a la universidad. Al no tener definido su derrotero de vida, opto por la medicina, pero abandono el primer año. Decidio entonces intentarlo con la música. Se compro un viejo piano en deplorable estado, sobre el cual practicaba, poco apasionadamente, su disperso deseo de ser músico.

La vida como una búsqueda de lo que es real, de lo que es verdadero, es un ejercicio de tremenda desolación y desencanto. Al entregarse a esta búsqueda probablemente el resultado será descubrir cosas nada deseables. Lo dijo Camus, y tenía toda la razón. El ser humano siempre fantasea y trata de proyectar lo que quiere ser, mas no lo que es realmente, porque la realidad nos daría palmos en las narices y luego nos tumbaría en la lona. La insensatez de vivir para ir a estudiar, conseguir un trabajo aburrido que te consumirá más de la mitad de tu vida, disfrutando de deliciosas, pero miserables migajas que solo sirven para anestesiar lo que el ser humano ya sabe: La vida como experiencia es un ejercicio maravilloso y miserable al mismo tiempo. La vida es una mierda. Depende de la concepción que cada quien tenga de la misma, pero el resultado final, siempre apunta a algo muy parecido, pues al ser tan perecederos, pareciera como si no existiese tiempo suficiente para aprender a vivirla bien. Vamos acumulando experiencias a través de los errores que cometemos, cuidándonos de tratar de no volver a cometerlos, pero las mismas piedras se atraviesan periódicamente en nuestro camino y no hay agilidad suficiente para evadirlas todas. Y no es que fallamos y después corregimos elegantemente. Parece que en cada ocasión solo fallamos de mejor forma. Es todo. Lian vivía en torno a ese espectro de pensamiento diariamente.


Y con las mujeres siempre era lo mismo. Pero con Elise parecía diferente. Sintió que ella lo hacía sentir demasiado bien consigo mismo. Estaba casi seguro que ella sería la mujer para el resto de su vida. Sentía la lujuria, todo el rollo pasional, a pesar de que ella no le presto mayor atención. Era una mujer diferente, entregada a una vida de desenfreno y obsesionada con la pintura. Estudiaba bellas artes y el mundo lo media en tonalidades, estilos, pinceladas y oleos. Lian continuaba su vida ambivalente, pensando constantemente en Elise... 


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Quiero conocer tu mundo....ese del que tanto hablas

miércoles, 30 de mayo de 2018

MI MUSICA (5)



Hola a todos:

Solo quería repostear esta entrada con la ultima actualización de mi música. Debajo de cada caratula dejo el link gratuito de descarga. Estos discos son un acercamiento a la música electrónica, el synth pop, el synth rock y otros.





Esta vez quiero presentar mi disco titulado "RIFF ANDROIDE"  Un abrazo. Y que siga la melodia!!!

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8. RIFF ANDROIDE (2018)





Año:2018
Temas: 12



Link de descarga: http://www.mediafire.com/file/nbqpr0lqab32cbo/RIFF+ANDROIDE.rar






7. LIBANO SONORA (2017)






Año:2017
Temas: 17


Link de descarga: http://www.mediafire.com/file/mpcgaacsg8ua6x6/LIBANO+SONORA.rar



6. MOMO TRACK (2016)






Año:2016
Temas: 28

Link de descarga: http://www.mediafire.com/download/rmpywwgqg6cwvuz/MOMO+TRACK.rar






5. ROJO STEREO (2015)




Año:2015
Temas: 14

Link de descarga:  http://www.mediafire.com/download/g2r6mu6yw65h3u6/ROJO_STEREO.rar



4. INSERTE DISCO (2014)




Año:2014
Temas:12

Link de descarga: http://www.mediafire.com/download/866ezq3n4czjyal/INSERTE+DISCO.rar






3. QUO ROCK (2012)




Año: 2012
Temas: 26
Link de descarga: http://www.mediafire.com/download/i5vd2chl7aqvzdb/QUO+ROCK.rar





2. JUEGO ELECTRICO (2011)





Año:2011
Temas: 12
Link de descarga:  http://www.mediafire.com/download/attx1jlea04tk7f/JUEGO+ELECTRICO.rar






1. VIENTO SEQUENCER (2010)



Año:2010
Temas:12
Link de descarga: http://www.mediafire.com/download/uh3jlvtoc81rjr1/VIENTO_SEQUENCER.rar






SONIDOS FUERA

STAROSTA


Mayo 30 del 2018