viernes, 21 de enero de 2011

LOS CORAZONES OCULTOS




Hola a todos

Antes que nada quiero felicitar a los organizadores del festival centro 2011 en Bogota por haber traido al gran musico Daniel Melero al cual tuve oportunidad de ver en primera fila (Nunca habia tenido ese lujo). Una experiencia inolvidable. Graciaaaaaas!!!!


Estas semanas que vienen estare publicando este nuevo libro titulado "Los Corazones Ocultos" El cual no alcance a publicar el año anterior, pues ya casi se acababa el año, por eso lo deje para iniciar el 2011. Pero con una gran novedad: No lo hice solo. Este libro se escribio integramente a cuatro manos junto a la escritora Vane Prada Rico. Les dejo el link de su blog:

http://vaprari.blogspot.com/



Vane Prada es una chica encantadora, soñadora y alegre de la ciudad de Bogota, es comunicadora social de la Universidad Santo Tomas y me dio el lujo, el placer, el privilegio de escribir junto a ella esta novela en un genero que era desconocido para mi en realidad y el resultado nos ha dejado plenamente satisfechos. El solo hecho de poder escribirla, de por si, ya es todo un merito en si mismo. Las publicaciones que hare seran un poquitito extensas espero no fatigarlos demasiado. Gracias

STAROSTA





CAPITULO I



- Y continuamos acá, en su emisora “Todas las voces”, esta noche lluviosa de Bogotá. Son las ocho y treinta de la noche de este lunes 2 de Octubre. Es la hora de su sección “Los corazones ocultos” Para estas semanas les traemos esta nueva radio novela. Las líneas están abiertas. Llámenos, coméntenos su opinión y si también les ha pasado. Soy Mariana, su locutora, y esta historia dice así:

“A través de la autopista, húmeda por la lluvia que había pasado horas antes, se podía ver reflejada la enorme ciudad. Los altos edificios se alzan implacables a ambos lados, como custodiando el corazón de las calles por donde se puede ver la luna mirándose en el reflejo del rocío del asfalto. Una ciudad que alimenta la imaginación. Una ciudad que atesora el silencio más que el oro, pues la contaminación por ruido es mercenaria de la calma de las personas que la habitan. Personas que a ratos se comportan como animales. Animales furiosos. Calles en la ciudad. Calles que por momentos también deja ver ríos de sangre. Violencia. Intolerancia. Cuchilladas dadas por necesidad, por ira o por venganza. Ciudad inalterable, por la cual todos vamos rodeados de gente, que esta cerca o lejos de ti. No importa, siempre vamos solos en realidad por estas calles, por estas avenidas por estos andenes. Ciudad que no cambia y a la vez va mutando contradictoria y sagazmente. En este lugar todo pasa de repente: Historias de amor, de desamor, días de sol, días de invierno. Gente que cada día llega y gente que se va, para no volver jamás. Una ciudad de puentes, de gente con mente y gente demente. Una ciudad que puede ser peligrosa, porque siempre va corriendo de la mano de la muerte. Ciudad preciosa que te da más de lo que puedas llegar a necesitar o pedir. Una ciudad de día. Una ciudad de noche. Un lugar que esconde secretos detrás de cada ventana. Que abriga historias increíbles. Algunas más lindas. Otras terribles. Una ciudad que se deja escribir su historia, cada noche.

Maribel estaba sentada en el borde de aquella cama de motel lujoso del norte de la capital. El espejo de cuerpo entero frente a ella revelaba una faceta suya que desconocía y que solo hasta ese momento se revelaba de una manera entrometida ante sus ojos: Era una amante. Una moza, como dirían en este país. Sus labios rojos develaban esa sensualidad desbordada que solo se dejaba ver cuando ella caía en el pozo sin fondo de la locura carnal desbordada. Ella, siempre tan femenina y tan orgullosa, había llegado hasta allí, presa de la incontenible necesidad de sentirse amada. ¿Con quien estaba? Eso era lo de menos. Solo su espalda sudada y el cansancio de su pelvis revelaban la intensidad de su entrega y la dopamina de su cerebro, desgranaba pinceladas de satisfacción mientras el sol empezaba a asomar una vez mas sobre la ciudad fría, que lo mostraba entre sombras y lloviznas, traídas por el mes de Noviembre. El mes de las almas, como le decía su madre, a la cual recordó y sintió vergüenza por un instante, por saberse en el lugar donde estaba y haciendo exactamente que.

Maribel traía la locura descarnada de las mujeres latinas: Piel trigueña, Piernas bien torneadas, senos firmes, trasero redondeado de tanto subir y bajar de los buses de transporte masivo día tras día, a donde acudía a su trabajo de recepcionista en uno de los mas prestigiosos periódicos de la capital. Por ser la primera imagen de la empresa ante un visitante, tenia que permanecer siempre presentable y eso era algo que a ella le quedaba fácil, pues por puro capricho del destino o la genética, su cabello permanecía siempre lizo y su cutis era de un blanco parecido a las porcelanas finas que se venden en los almacenes de antigüedades a precios alarmantes para el costo de vida de la nación. Sin mucho esfuerzo se podía transformar de una chica humilde venida del interior del país, a una mujer fatal, preciosa y sensual.

El baño del motel se abre y da paso a un hombre de unos cuarenta años (Casi veinte mas que la edad de Maribel) hace su aparición en la escena. Juan Manuel, de lo mas alto en la pirámide organizacional del Periódico, padre de familia, dos hijos: Manuelita y Mateo, ambos entrando a la adolescencia y María del Carmen, Su esposa, dueña de una floristería de prestigio, la cual ni se imaginaba en las que andaba su marido en aquellos momentos. Un hombre de mentalidad brillante, buenos modales y educación de posgrados en el extranjero, totalmente perdido en su mente y su razón por una recepcionista que lo llevo a recorrer el agridulce sabor de la infidelidad y el inventar excusas absurdas a deshoras de la noche tales como: “No…imagínate. La producción se atasco y tengo que quedarme a revisar la impresión” o “No puedo ir a casa todavía, hay reunión de última hora por lo del tema del presidente….yo después te explico”

Maribel lo sigue con la mirada, ve como él recoge su ropa y comienza a vestirse. Se desilusiona, sabe que se acerca el final de aquella noche con pinceladas de pasión, algo de amor pero sin duda, sabor y olor a lo prohibido. Ella guardaba la esperanza que pasaran juntos lo que quedaba de noche, quería recrear las escenas de las telenovelas o las de los libros de amor que leía con la ilusión de encontrar su príncipe azul.

Desde el primer día de trabajo, supo que algo iba a pasar con Juan Manuel. Se fijo en él desde que lo vio caminar por el pasillo de la recepción hablando por celular. Jamás olvidará que alzó su mirada para ver el dueño de aquella voz y esa estela de perfume que quedó en el ambiente la envolvió e impregnó hasta su alma… ¡Esa misma mañana se prometió que tendría a ese hombre!

Mientras él se vestía, comenzaba a arrepentirse. Sabía que Maribel era de aquellas mujeres que elegían a los hombres y presentía que lo que acababa de pasar, era el comienzo de “algo” que por primera vez, no podría manejar y eso le generaba incertidumbre y dudas; sentimientos que jamás se permitía tener.

Ella prendió un cigarrillo y empezó a buscar su ropa interior. El brasier negro con encaje rojo, lo encontró detrás de una de las mesas de noche, su panty estaba enredado entre las cobijas, sus medias veladas así como su falda y su camisa estaban detrás de la cabecera de la cama.

Ninguno sabía que decir, para los dos resultaba incomodo ese silencio puesto que, era la primera vez que estaban en la posición de tener una relación netamente pasional.

- Quieres que te lleve a tu casa- dijo Juan
- No, tranquilo, yo llamo un taxi – Contesto ella

“¡Dios que tonta! ¡Como dije eso!” Pensó Maribel. Se moría de las ganas que sus amigas del barrio la vieran llegar en carro con semejante hombre manejando y si estaba con suerte, ellas hubiesen visto como él le daba su beso de despedida…

Mientras esperaba que ella se terminara de vestir, tomó su blackberry y se percató de las 5 llamadas perdidas que había en su celular, 3 de su apartamento y dos del celular de su esposa.

Presentía que ella pronto se iba a dar cuenta de sus aventuras extra matrimoniales. Un amago de nausea lo invadió, pero pronto se tranquilizo ante la premisa aquella de que un hombre siempre sabe como escapar…


El viento helado de la madrugada acaricio el rostro de Maribel mientras se subía al taxi. Desde el otro extremo de la calle Juan Manuel supervisa la partida de su aventura, mientras enciende el automóvil, rumbo a su casa. En el camino se distrae recordando el cuerpo desnudo de Maribel encima suyo, moviéndose y mojándose desfrenadamente. Una sonrisa maliciosa se asoma en sus labios y de repente frena en seco el auto. Estuvo a punto de arrollar a un ciclista, repartidor de periódicos.

- ¡Me va a echar el carro encima o que gran pendejo!
-Perdón, perdón…Balbuceo mientras levantaba la mano derecha y retomaba de nuevo la marcha.

María del Carmen ha estado despierta toda la noche. No ha podido dormir, presa de una inevitable cantidad de presentimientos femeninos y dudas. Su esposo, Juan Manuel, ha estado actuando de una manera un poco “extraña” a lo acostumbrado. Claro que no tiene por que preocuparse ¿Por qué hacerlo? Doce años de matrimonio y una conducta ejemplar, como padre y esposo, son suficientes para no desconfiar, pero…Las novedades de las últimas semanas generan en ella una sensación de algo que no había sentido hasta ahora. Una inseguridad que la recorre y le hace revaluar su comportamiento en los últimos años: Siempre ocupada con los chicos, la floristería que demanda mucho tiempo y atención, el sexo con su marido, que se vuelve cada vez más escaso y que en ocasiones se limita a algunos besos y caricias rápidas, algunos jadeos fingidos mientras piensa en los arreglos florales que tendrá que entregar para algún cliente al día siguiente. Y ahora, las llegadas tarde de Juan Manuel, por motivos que nunca antes se habían presentado en su trabajo. Después de dos partos y el paso a los treinta y seis años de edad el mes anterior, de alguna forma han hecho mella en su cuerpo otrora juvenil y fresco. Nunca se había percatado de esos detalles hasta ahora. ¿Será que su esposo también lo ha pensado? Y no tendría nada de raro, pues él está en la edad de los cuarenta y a esa edad, los hombres están en la etapa de la inestabilidad. Están buscando tentaciones. ¿Y si su marido ya las encontró? Sintió como un calambre en su estomago y se tomó la cara a dos manos, mientras una lágrima rodó silenciosa por la habitación conyugal de cortinas corridas y luces apagadas. Tal vez todo era solo producto de su imaginación y su esposo está ocupado trabajando y va a llegar cansado, con ganas solo de dormir y no de escuchar reproches. Pero… ¿Y si no era tan así?

En ese instante escucho el ruido del portón del garaje. Su esposo había llegado a casa….Casi a las seis de la mañana…

Juan Manuel introdujo las llaves de la casa lo más despacio posible para evitar hacer ruido pero todo su esfuerzo fue en vano cuando Firpo, un Fila Brasilero, salió a recibirlo con ladridos y movimientos de cola.

Lo calmo inmediatamente acariciándole una de sus orejas y alzó la mirada para observar la hora en el reloj de cuerda situado al frente de la puerta ‘‘Mierda, es tardísimo’’ pensó Juan mientras se quitaba su chaqueta y la dejaba en el perchero

- ¡Papi! Dijo Manuelita abrazando a su padre
- Hola querida, ¿Ya te vas a bañar para irte a estudiar?
- Si papi... ¿Acabas de llegar?
- Si mi muñequita, es que papi debe trabajar mucho para poder darte todo el gusto del mundo
-Hay pa… pero es re tarde ¡Como te negrean en ese periódico!
- Vete a bañar que se te hace tarde

Al entrar a la habitación conyugal, encontró la cama tendida y a María del Carmen abriendo las cortinas del cuarto.

- ¿Sería, Buenos días o Buenas noches Juan Manuel?
- Hay… María, no comiences, estoy completamente agotado - Dijo mientras destendía su lado de la cama.
- ¿Vas a desayunar algo?
- ¡No me ves metiéndome en la cama! Despiértame en dos horas y media por favor…

María del Carmen se limitó a salir de la habitación viciada por su rabia, era imposible que una junta se demorara hasta la mañana del día siguiente. Revisó que los muchachos se estuvieran alistando para ir a estudiar y al ir a revisar cómo iba el desayuno, observó la chaqueta de su marido, la cual tomó rápidamente e introdujo sus manos en cada uno de los bolsillos que tenía, pero para su sorpresa (o desgracia) no encontró sino papeles de parqueadero y monedas. Pero al olerla, sintió un vestigio de olor a perfume de mujer, no supo con claridad, estaba mezclado con cigarrillo y humedad.

- Estoy alucinando - pensó mientras llevaba la chaqueta al cuarto de ropas, ya era necesario lavarla.”

Bueno hasta aquí por esta noche. Mañana continuaremos con esta historia. Me despido con la canción: “Crímenes perfectos” De Andrés Calamaro. Soy Mariana, su locutora. Buenas noches…




NO CAMBIE DE EMISORA. SIGA SINTONIZADO



CONTINUARA...


















lunes, 17 de enero de 2011

STAROSTA 2011




Hola a todos:


Espero que este año los haya recibido de la mejor manera en que se pueda recibir un año mas en la vida. Esta entrada, sin un motivo particular, es para agradecerles a todos sus comentarios de feliz año, tanto en mi blog como en mi correo y para manifestar la reciprocidad de esas buenas maneras que tuvieron para conmigo y con mi blog en el 2010 y espero y aspiro, sigan estando en el 2011. Para este año (Despues de escuchar sabios consejos de amigos y conocidos) Continuare publicando el blog. One more year. Gracias a Camila y a Julian por la insistencia. Y les digo a todos: Vivir para callar, no me deja conforme. No se olviden...

Para este año publicare mas libros nuevos (Eso espero y aspiro) y tambien espero tener el tiempo y el espacio para publicar los libros que he escrito y que aun no han sido publicados aqui. La idea es que este blog tenga un registro de toda mi "Obra" Y uso las comillas porque no soy tan pomposo para creer que todo lo que escribo y hago, es una obra.

Tambien espero poder compartir por este espacio ademas de lo que escribo, otras cosas que hago en mi vida. Lease: Musica y pintura. Ya veremeos que pasa....


Me despido, nos vemos este viernes como siempre... que comience la funcion...



¡El freak show: Starosta 2011!